En estos meses de confinamiento hubo un solo huésped en el Hotel W de Barcelona.
El director de ingeniería del establecimiento, Daniel Ordóñez, permaneció confinado en su lugar de trabajo más de dos meses y con un solo objetivo: abrir cada dia los 1400 grifos de este lujoso hotel.
Un hecho que puede aparecer curioso o hasta estrafalario, en realidad es una medida fundamental para prevenir la proliferación de la legionella.
Una bacteria que genera una enfermedad muy grave que afecta el sistema respiratorio y puede ocasionar la muerte en los sujetos con menos defensas.
En un momento en que la Sars-CoV-2 monopoliza toda nuestra atención, se corre el riesgo de olvidarse de otros patógenos.