La posibilidad de que las siguientes generaciones disfruten de una esperanza de vida más larga de la de sus padres ha sido hasta hace poco una certeza inquebrantable. Sin embargo, el aumento alarmante de los problemas de sobrepeso y obesidad entre la población infantil pon en entredicho esta previsión. Niñas y niños de casi todos los países del mundo, tanto de altos como de bajos ingresos, están sufriendo un alarmante aumento de su peso corporal, al punto que enfermedades como la diabetes de tipo II o la hipertensión, más propia de la edad adulta, ahora se diagnostican con más frecuencia en la población infantil. El coctel explosivo de vida sedentaria y comida ultraprocesada es la principal causa de esta alarmante tendencia.
En un artículo de hoy en La Vanguardia se profundiza sobre los datos científicos y clínicos más actuales aquí.