Si alguna enseñanza nos va a dejar la crisis del Covid-19 es la presa de conciencia de la importancia que tiene el hábito de lavarnos las manos para preservar nuestra salud.

Ayer 5 de mayo se celebró el Día Mundial de la Higiene de Manos y esta celebración pone el foco sobre un hecho tan intuitivo: la seguridad empieza en nuestras manos.

La higiene de las manos en la restauración colectiva es un punto fundamental: un gesto tan sencillo y fácil como es lavarse las manos garantiza que la producción de alimentos sea segura cara a la salud humana. Especialmente ayuda a proteger a los consumidores de riesgos tan graves como puede ser una toxiinfección alimentaria.

Según la OMS un manipulador de alimentos puede transferir patógenos a cualquier tipo de alimento. Peligro sanitario que se puede evitar tan solo con una buena higiene personal y un correcto y frecuente lavado de manos, primera medida de prevención para evitar la contaminación de la comida.